
Cinco pasos para dejar la dependencia del celular y recuperar tu salud mental
El primer paso consiste en reconocer el problema y establecer una estrategia de desconexión. Como sugiere Harvard, comienza por identificar los hábitos que activan el uso compulsivo: ¿son las notificaciones, el aburrimiento, la necesidad de aprobación? Luego, define objetivos claros: reducir el tiempo en pantalla a una o dos horas, establecer franjas sin celular o días libre de redes. Crear un plan estructurado es el primer paso hacia un cambio real.
Por qué importa: Sin intención clara, el uso digital se perpetúa. Planificar promueve el autocontrol y reduce la reactividad automática frente al celular.
Saber qué te dispara a abrir el feed es clave. Harvard recomienda anotar en qué momentos tomas el celular sin querer: mientras esperas, te aburres, te sientes ansioso. Una vez detectados esos instantes, propone reemplazarlos con actividades alternativas: leer, caminar, crucigramas, conversar. El objetivo es reemplazar la gratificación digital con hábitos que nutren el bienestar emocional.
Por qué importa: Reemplazar un impulso automático por una acción consciente fortalece la autorregulación emocional.
El siguiente paso es reducir la tentación. Puedes eliminar apps del celular, desactivar notificaciones o usar herramientas para limitar su uso diario . También existen aplicaciones diseñadas para bloquear temporalmente el acceso o restringir apariciones del feed.
Por qué importa: Al eliminar la facilidad del acceso, el uso deja de ser automático y se convierte en una decisión consciente.
Compartir tu plan con terceros fortalece el compromiso. Harvard sugiere contar con un “compañero responsable” que te ayude a seguir las pautas, te recuerde y haga seguimiento . Puede ser un amigo, pareja o familiar que valide tu esfuerzo y te acompañe cuando caigas en la tentación.
Por qué importa: El apoyo externo crea responsabilidad, genera empatía y reduce la sensación de hacerlo “a solas”.
Finalmente, Harvard recomienda establecer un periodo de prueba —una semana o un mes— tras el cual se evalúa el impacto emocional, se reajustan límites y se decide si se regresa, cambia o elimina el uso de redes . También es fundamental revisar cómo te sientes: ¿más tranquilo? ¿con más tiempo libre? ¿mejor calidad de sueño?
Por qué importa: Reflexionar sobre los resultados refuerza el aprendizaje, evita retrocesos y define el uso digital de forma consciente.
[post_banner title=”¿Necesitas apoyo? Selia te ayuda” body=”Sana tus heridas con terapia online personalizada. ¡Agenda una consulta!” cta=”Comienza ahora” cta_url=”https://users.selia.co/sign-up/?utm_source=seo&utm_medium=blog&utm_content=maneja-el-estres”]
El estilo compulsivo de consumo de contenido negativo —el “doomscrolling”— refuerza emociones adversas. Interrumpir ese patrón con el método reduce la sobreexposición a noticias negativas y desarrollos tóxicos, lo que favorece el bienestar emocional.
Sustituir el celular con actividades significativas incrementa la presencia plena y la conexión con las personas y actividades reales: caminar con atención, leer un libro, conversar cara a cara o disfrutar del silencio. Son prácticas beneficiosas para el cerebro que generan calma y bienestar.
El método de cinco pasos de Harvard no es una moda pasajera, sino una guía científica basada en conocimiento psicológico. Su aplicación consciente ayuda a recuperar el bienestar emocional, reducir la ansiedad, potenciar la atención plena y reforzar la salud mental. En SELIA, lo invitamos a ponerlo en práctica y rediseñar una relación más sana y equilibrada con las pantallas.










Si tú o alguien que conoces está experimentando una emergencia o una crisis y necesita ayuda inmediata, llama a la línea 192 opción 4 (en Colombia) o dirígete a la sala de emergencia más cercana. Encuentra recursos adicionales para crisis.